Estrategia de contenido útil y relevante, le contamos cómo lograrlo

Es cierto que gran parte del éxito de su estrategia digital se va a deber al contenido, así que no pierda tiempo y aprenda desde ya a ganar notoriedad y relevancia gracias a sus publicaciones.

Para los emprendedores, y para las empresas en general, una de las estrategias de marketing más utilizadas es la presencia en el mundo digital. Sin embargo, ya sabemos que tener un perfil en redes sociales no es suficiente, es necesario crear una comunidad, interactuar con ella, invertir en publicidad para lograr cierta notoriedad y lo más importante, generar contenido relevante y que le otorgue valor a los seguidores.

Una vez que ya sabemos esto, surge la siguiente pregunta, qué es realmente un contenido relevante, y lo mejor del caso cómo hago para crearlo. Si se plantea estas interrogantes continúe leyendo y entérese de algunas recomendaciones para crear contenido de valor en el mundo digital.

Ofrezca respuestas: vivimos en un mundo lleno de interrogantes, donde además las personas están ansiosas por consumir información. Hoy en día, cuando alguien se plantea una pregunta a la que no tiene respuesta acude a internet a buscarla, es por ello, que desarrollar contenidos que respondan a ¿cómo se hace?, ¿por qué sucede tal cosa?, ¿dónde puedo encontrar algo? O ¿qué hacer para?, puede ser una apuesta ganadora. Esto se evidencia en el éxito que suelen tener los tutoriales o todo el contenido DIY.

Relevancia: esto se trata de crear contenido en el momento indicado, sobre lo que las personas están necesitando. Si estamos en invierno, no es apropiado generar contenido sobre recomendaciones para lograr una habitación más fresca o ventilada. Es por ello, que es importante mantenerse al día con las tendencias y hablar sobre los temas que están en la actualidad, esto implica inmediatez, oído y olfato para saber hacia dónde se están moviendo las conversaciones digitales.

Recomendaciones: muchas de las veces que las personas están en internet es buscando opciones o consejos, de hecho está demostrado, que hoy en día previo a la decisión de compra, la mayoría de las personas acude a internet a buscar sugerencias o reseñas sobre el producto o servicio que desea adquirir. Es por ello, que brindar recomendaciones, o tips, resulta útil y relevante. Si además, de eso vienen acompañadas con datos de interés o poco conocidos, resulta mucho más atractivo.

Cuida los detalles: no basta con solo tener un buen contenido, es necesario saber cómo presentarlo, por ello debemos experimentar con diferentes formatos, videos (muy bien recibidos), gifs, infografías, fotos, podscast, etc. Debe existir un balance entre los recursos audiovisuales y los textos para hacerlo mucho más atractivo y adaptable a las diferentes personalidades. Ojo con la ortografía y redacción, esto habla mucho de su empresa.

No olvide el storytelling: las personas conectan mucho mejor con las historias, es por eso que busque de darle a su contenido un toque personal e íntimo, contar algo con lo que los lectores se puedan sentir identificados y que además los conecte emocionalmente y les deje una enseñanza o aprendizaje.

¡Adiós a las reuniones poco productivas!

El intercambio de ideas y la interacción que surge durante una reunión es enriquecedor para los procesos de las empresas, sin embargo, muchas veces estos encuentros suelen convertirse en algo tedioso, innecesario y hasta desgastante. Esto se debe a que nos acostumbramos a reuniones poco efectivas.

Es normal sentir que las reuniones son una pérdida considerable de tiempo, por lo general suelen ser muy extensas, en ocasiones se dificulta llegar a acuerdos concretos y en otras oportunidades se pierde el foco de la reunión. Hay estudios que aseguran que solo en Estados Unidos se pierden más de 37 billones de dólares al año en reuniones no productivas

A pesar de esto, son una práctica necesaria para el desarrollo del negocio y el trabajo en equipo. Entonces ya que se sabe que es casi imposible erradicar las reuniones de trabajo, es importante conseguir maneras de llevarlas a cabo de la forma más eficiente posible. A continuación, le dejamos algunas recomendaciones para lograrlo:

Pertinencia: lo primero, ante la tentación de convocar una reunión, es tener claro si es realmente necesario su realización. Previamente se deben haber agotado otras vías como correo electrónico, llamada telefónica, etc. Una vez que ya evaluó esas opciones y la reunión parece ineludible, establezca de forma clara el objetivo de la misma, pregúntese qué necesita y qué espera lograr, haga un análisis individual que sirva de base para tomar decisiones.

Asistentes: de este punto dependerá gran parte del éxito o fracaso de la reunión. Si no se elige correctamente a los participantes, es posible que se desvíe el objetivo, que los aportes no sean de valor o que contrario a avanzar, se retroceda en el tema. Para tener mayor claridad en este apartado, existe una clasificación de asistentes que le puede ayudar a definir su lista de convocados: los tomadores de decisiones, los que tienen la información, los que tienen un rol en los problemas, los que necesitan saber lo que se comunicará en la reunión para realizar su trabajo, los que implementarán las decisiones tomadas (en el caso de los últimos dos, se puede evaluar comunicarles lo resuelto posterior a la reunión).

No deje nada al azar: la improvisación es el peor aliado de las reuniones efectivas. Es por ello que debe preparar todo con suficiente antelación; compartir previamente con los asistentes la información necesaria para su participación, hacer una agenda, establecer una dinámica de realización, definir roles en caso que sea necesario, preparar material de apoyo, probar los equipos y las condiciones de la sala, ser estrictos con la puntualidad y respetar el objetivo de la reunión evitando desviaciones o distracciones.

Cerrar con broche de oro: para determinar si una reunión fue efectiva, es casi tan importante lo que sucede después de una reunión, como la preparación previa. Es fundamental que una vez que la convocatoria haya finalizado se comparta con los participantes una minuta donde estén escritos los acuerdos y responsables que se establecieron en la reunión. Asimismo, es importante hacer seguimiento a estos puntos, con el fin de asegurar su cumplimiento y avance, lo que demostrará que el tiempo invertido en la reunión dio frutos.