Reunión con inversores, qué y que no hacer

Reunirse con inversores puede hacer sentir nervioso a cualquiera y por eso es muy importante estar y sentirse preparado. Los nervios a veces pueden ganarte y hacerte decir o hacer cosas que puedan ser mal interpretadas, es por esto que hoy te damos algunos consejos de qué y que no hacer durante una entrevista con inversores

Qué no hacer

Pedir dinero en la primera reunión
No puedes pensar en pedir dinero cuando ni siquiera has explicado tu negocio, de que va, y que pretendes conseguir con el.

Todo inversionista va a necesitar conocer tu negocio, leer tu plan de negocios, tus estrategias, para poder estar seguro de en qué se está metiendo. Debe tener tiempo para poder evaluar y enamorarse de tu idea.

Al ser paciente y hacer las cosas con orden estás mostrando respeto para con el inversor, dándole a entender que buscas sus habilidades y experiencia y no sólo un cheque.

Mentir 
Me sorprende cuán seguido un emprendedor asegura algún hecho incorrecto. Una cosa es resaltar algunos aspectos del negocio (e incluso embellecer algunos otros), y otra cosa completamente distinta es mentir acerca de temas esenciales, compromisos, relaciones, entre otras cosas.

Tarde o temprano, la verdad saldrá a la luz, así que no tomes el riesgo –las palabras viajan rápidamente entre la pequeña comunidad de inversionistas.

Establecer términos o precios

Deja que el mercado hable por tu empresa. Puedes guiar a un inversor potencial sutilmente.  Establecer términos a los inversores diciendo algo como “No tomaré menos que esta valuación” es la mejor forma de desanimar a un inversionista y de perder su interés. Busca formas inteligente de presentarlo.

Qué sí hacer

Sé seguro, pero respetuoso
Debes tener confianza en tu negocio y en tu habilidad para ejecutarlo. Pero esto es muy diferente a ser arrogante. Nadie quiere a un arrogante y menos va a invertir en él.

Lo ideal es que des una vibra de conocer tu negocio, de saber más que otros, de confianza en tus ideas, sobre tu empresa, esto motiva a los demás y los hace sentir curiosos o interesados

Da seguimiento y entrega actualizaciones

Como mencioné en la parte de Qué no hacer: La mayoría de los inversionistas no invierten en la primera reunión. Indica qué planeas hacer y muéstrale al inversor lo que vas haciendo con el tiempo. Cuando continuamente les demuestras que estás evolucionando y construyendo un record, es más probable que estén dispuestos a financiarte.

Aprende cuándo cerrar la puerta

Aun cuando el inversor decida no invertir, no te pongas a la defensiva o digas que el inversionista es ignorante, sin importar qué tan equivocado creas que está. Nunca sabes cuándo te encontrarás nuevamente con él. Mantén las cosas cordiales, con vista en el futuro, y si todo sale bien, podrías atraerlo en tu siguiente reunión.

Estos breves tips pueden ser de mucha ayuda para todo emprendedor que tenga una reunión importante con inversores. Se tu mismo, relájate un poco, proyecta seguridad y ¡manos a la obra!

Conquista inversores, ¡como nunca antes!

Actualmente hay muchos emprendimientos y no suficientes inversores. Los dueños del dinero y los emprendedores deben aprender las condiciones de unos y otros, pero muchas veces hay un cortocircuito cuando se trata del tema administrativo, por ejemplo, uno de los factores que los inversionistas analizan primero, pero que los emprendedores dejan al último. Hoy vamos a ahondar un poco en esto y cómo lograr conquistar inversores.

Errores comunes de los inversionistas

Invertir, como todo, es un arte, lleva su trabajo, toma su tiempo, es precisamente por esto que cometer errores es algo normal, parte del proceso, pero antes de caer en ellos resulta mejor evitarlos. Hoy les presentamos algunos errores comunes que cometen los inversores para buscar por todos los medios, evadirlos.

  1. No tener en cuenta el horizonte temporal de los objetivos de inversión

Es importante que el inversor establezca un orden para sus objetivos de inversión, estos puede dividirse en corto plazo (hasta un año-18 meses), medio plazo (desde 12-18 meses a tres-cinco años) y largo plazo (normalmente más de cinco años) y será fundamental para el inversor trabajar conforme a ese orden.

2. No analizar cuál es el mejor momento para comenzar a invertir

Grave error. No analizar los momentos puede afectar en el inicio de la gestión, sobre todo en horizontes temporales muy cortos. Para el inversor el verdadero desafío será siempre escoger el momento adecuado.

3. Comprar una sola acción con todo el dinero disponible 

La clave para invertir es la diversificación, al hacerlo es mucho más sencillo tolerar las subidas y bajadas del mercado. Lo que pierde en un activo, lo puede recuperar en otro título con mejor desempeño.

 4. No manejan un fondo de emergencias

Es necesario que todo emprendedor maneje un fondo que le permita tener una solvencia cuando haya alguna emergencia. Los inversores deberían tener en este fondo ahorrados al menos seis veces su ingreso mensual en cuentas de ahorro o certificados de depósito a término.

5. Dejarse llevar por las emociones

¡Nada más peligroso que esto! Al invertir emocionalmente los errores serán muchos y se está destinado al fracaso. Por es es tan importante adquirir el conocimiento requerido para diseñar un sistema de inversión inteligente, fundamentado en la razón y no en la emoción.  Con un sistema bien diseñado, podremos obtener ganancias, tanto si el mercado de valores va en ascenso, como cuando sufre una caída aparatosa.

6. No hay paciencia.

Una vez que tienen un portafolio de inversión, los inversionistas novatos esperan tener resultados inmediatos o buscan cambiarlo la primera vez que pone a prueba su disciplina. Es necesario ser paciente, saber esperar, no apresurar ni forzar las cosas, tampoco invertir de manera constante e insistente. Es mejor ver los resultados de forma progresiva.

7. No aprender sobre cómo invertir

Grave error. No hay nada peor para un ser humano que la ignorancia, y en este caso un inversor ignorante  es instrumento ciego de su propia destrucción. El aprendizaje se hace indispensable para el éxito de las inversiones en la Bolsa de Valores.