Persuadir es un arte y es por esto que hoy le dejamos una serie de características que le servirán como lecciones de vida para cualquier situación en la que requiera el apoyo de alguien para lograr el cumplimiento de un objetivo.
Una de las principales características de un buen líder es la capacidad de influenciar positivamente en las personas, específicamente en sus equipos. Pero no solo, es importante para gestionar grupos, también lo es para crear alianzas, cerrar negociaciones, sumar adeptos a una idea, ejecutar proyectos y/o atraer clientes, elementos que seguro necesita si está emprendiendo un negocio o pensando en hacerlo, si es su caso le conviene seguir leyendo cuáles son las características que debe desarrollar para influir en las personas.
- La valentía se contagia: ¿Quieres lograr que esa persona con la que interactúas se llene de coraje y te acompañe en un proyecto que deseas llevar a cabo, pero implica ciertos riesgos? Comienza por ti, demuestra seguridad y confianza, apóyate en tus fortalezas e identifica tus debilidades para que las personas vean en ti a alguien decidido y con convicciones firmes.
- Sumar y multiplicar: Conocer a las personas, acercarse e indagar sobre sus intereses y motivaciones, es fundamental para crear vínculos; los cuales posteriormente servirán para identificar puntos en común que le permitan contagiar sus ideas y sumar cómplices o aliados, que se conviertan en multiplicadores de lo que usted desee lograr. Una red de contactos extensa y de calidad le permite ampliar sus opciones al momento de conseguir apoyo para alcanzar lo que desea lograr.
- Predicar con el ejemplo: Dar el primer paso, demostrar que sí se puede, arremangarse las mangas y ensuciarse las manos para lograr un objetivo, demuestra que usted es una persona comprometida con sus sueños, y eso hará que las personas sientan seguridad de seguirlo, porque saben que es alguien en quien pueden confiar y que irá hombro a hombro con ellos, remando el barco para salir a flote.
- Compartir: Todo el mundo es más propenso a rechazar algo que no conoce o sobre lo cual no tiene información. Es por ello, que cuando se quiere atraer a las personas a un proyecto o idea, es esencial aprender a compartir. Las personas se sentirán más abiertas ante alguien que les brinda información, que comparte sus triunfos, e incluso asume las responsabilidades de las derrotas. Plantear la posibilidad de participación en la toma de decisiones y establecer un modelo en el que todos sientan que ganan algo, es clave para lograr influenciar.
La persuasión es un arte, que radica en la sutiliza, pero que sin duda, no logrará dominar de la noche a la mañana, ya que implica experticia. Sin embargo, recuerde que alguien que ama lo que hace es capaz de contagiar, incluso hasta al más incrédulo, esa es y será siempre su mejor carta de presentación.